13/9/11

Nota en Espaciogastronomico.com.ar


Recetas de éxito gastronómico: Nucha, pasión por la repostería

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Por Norka Guevara Sipión


En Buenos Aires, si por un rato nos detuviéramos a observar a la gente que en ese justo momento atraviesa la Av. del Libertador, y luego a los autos que reanudan la marcha… Si nos permitiéramos una pausa en mitad de tanta prisa… ¿Por qué no hacerlo con un café? ¿Con un blend tea, quizás, y un delicioso bizcocho? El ambiente ya lo tenemos: Nucha.
Siempre hay un lugar
Hace pocos días, la cadena de cafeterías Nucha inauguró su octava sucursal en una exclusiva zona de Belgrano conocida por su oferta gastronómica para paladares exigentes. Cada vez que abrimos una sucursal, decimos que no vamos a abrir ninguna más… La realidad es que siempre hay un nuevo espacio para Nucha en la ciudad, y puede ser que para el año que viene halla alguna novedad. Seguramente va haber más Nuchas, comenta entre risas, Hernán Rivas, encargado de Marketing de Nucha.
Un ambiente bien pensado, como para tomarse un descanso a cualquier hora, entre la calidez que brinda la combinación del blanco y la madera, la generosa iluminación y la música al interior. Aunque varias mesas al exterior se postulan como el sitio preferido ahora que la primavera regresa. Para compartir en pareja, con amigos o con la familia, porque es justo ésa una de sus mayores cualidades: en Nucha siempre hay un lugar para cada quien, y gracias a ello es una cafetería de tradición en la ciudad.
Su historia es bastante conocida. Lo que empezó siendo un pequeño negocio en un garaje, de pastel en pastel y con mucha dedicación fue transformándose en una de las cafeterías más top de Buenos Aires, cuyos referentes principales están en Francia y Estados Unidos. En el 2001 nació la primera sucursal, durante una época macroeconómica poco favorable, que sin embargo resultó la oportunidad perfecta para comenzar: Tal vez en las crisis uno se pone más creativo, pone mayor esfuerzo en su negocio como para sacarlo adelante y eso tuvo que ver con Nucha. Al principio cuando arrancó se utilizó mucho la creatividad, e igualmente se sigue usando en renovar día tras día su repostería, nos cuenta Hernán.
Creciendo con pasión
El crecimiento que ha tenido Nucha definitivamente es resultado del trabajo constante y orientado a puntos claves en el negocio gastronómico: el producto y el cliente.
Hoy en día cuentan con un laboratorio para crear nuevas recetas con materia prima de la mejor calidad. La misma Regina Vaena, precursora de Nucha, junto a Xavier, su hijo, y quienes conforman el equipo del laboratorio, son los encargados de dar el veredicto final a cada producto, porque todo empieza allí, cuidando que cada postre que luego comamos en la cafetería haya sido testeado. Y es que Nucha tiene una gran pasión: la repostería. Esto es fácil saborearlo de un bocado. Nucha ha trabajado toda su vida en repostería, fue su pasión, y eso se ve reflejado en cada producto, desde una media luna, que tal vez es lo más simple que podemos tener, hasta nuestra torta más elaborada (…) Si el producto no salió bien, no sale de la planta, comenta Hernán. Pero la familia Nucha tiene otra pasión: agasajar a sus clientes. ¿De qué manera? Primero con productos frescos y deliciosos, y claro, creando ambientes confortables, donde no estén todas las mesas bien juntitas y puedan realmente sentir el evento del té, y que se sientan cómodos, ya que para todo nucho, la hora del té es una celebración, del amor, de la amistad… Y se lo hace de lo mejor, con dulces elaborados de manera artesanal: cuadrados, muffins, alfajores, budines, tortas, entre otros, sin que falte además la línea light.
Cumpliendo sueños
Nucha quiere cumplir los deseos de muchos niños y niñas. Es por eso que junto con la Fundación Make a Wish lanzaron hace poco la Wish Card. De modo que, en cualquiera de las sucursales, cada vez que un cliente pague presentando esta tarjeta, Nucha dona el 15% del ticket a la fundación. Además, el primer martes de cada mes, en las sucursales Patio Bullrich, Lafinur y Salguero, se festeja el Wish Day y la donación por cada ticket es del 50%.
Nucha siempre estuvo ligada a la responsabilidad social, pero de una manera más casera, más anónima, a través de Xavier (…) pero ya había sido una inquietud desde hace mucho tiempo, colaborar más… Lo que se está haciendo es aprovechar la estructura de Nucha para poder cumplir los deseos de niños y niñas de la fundación, dice Rivas.
La estrategia de Marketing
Nuestra gran acción de marketing es nuestro producto, nos dice Hernán. Esto en referencia a que la comunicación de Nucha está basada mayormente en el boca a boca, gracias a la calidad y tradición. Entonces, el presupuesto y energía están destinados al producto y lo que ello implique, como vigilar los tiempos de consumo y tratar el excedente. Pero las nuevas tecnologías exigen innovarse, es por eso que actualmente mantienen un contacto cercano y prácticamente a diario a través de las redes sociales Facebook y Twitter, compartiendo sorteos y noticias.
Más que ser solo una cafetería, hoy por hoy se trata de generar amistades. No obstante, para quines empiezan a incursionar en el negocio gastronómico, Hernán recomienda no descuidar lo principal, el producto: A veces, en la gastronomía, por abaratar costos, por tener mayores márgenes, las materias primas que se les pone a los productos no son las mejores, a veces pasa también que la vida útil de un producto se la estira uno o dos días más… Recomendaría no hacerlo. Esto sin duda nos habla de un marketing gastronómico en movimiento, que siempre está pensando en el plus que el cliente espera, pero que no debe perder de vista su oferta principal.
Todo ello demuestra que la experiencia no es casualidad. Nucha acaba de cumplir diez años de su primera sucursal, y seguramente continuarán sumando. En otras palabras, seguiremos teniendo más Nuchas en la ciudad.
DatosLa nueva sucursal de Nucha está ubicada en Sucre 664, Bajo Belgrano, C.A.B.A.

Nota en Espaciogastronomico.com.ar


Causas y efectos: La gastronomía de Perú en Buenos Aires

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Por Norka Guevara Sipión
Situado en el punto de encuentro de numerosas nacionalidades y culturas, por tradición, el porteño ha probado sabores europeos, asiáticos o aquellos provenientes de medio oriente, pero con poca frecuencia se ha encontrado, por ejemplo, con un auténtico Ceviche. Sin embargo, algo curioso ha venido sucediendo desde hace unos 15 años en Buenos Aires en relación a las gastronomías de países más cercanos. Aunque, claro, si observamos con más atención, esto no resultaría tan curioso sino al contrario, es uno de los gratos resultados de un movimiento inmigratorio que empezó hace ya más de una década y que, como todo proceso, ahora nos permite ver sus efectos. Y por qué no: probar sus sabores.
Tradición culinaria y peruanidad
Hoy en día podemos también hablar de un movimiento gastronómico latinoamericano, joven aún y muy prometedor. Esta cocina ha logrado despertar el apetito de la ciudad, con aromas y sabores originarios de las montañas andinas, de las costas del Pacífico o de la Amazonía. Y entre sus grandes embajadores está el Perú, que ha traído en su equipaje de riqueza cultural su extensa tradición gastronómica, producto de la diversidad geográfica, de la influencia de numerosas culturas de otros continentes y de su ineludible raíz milenaria, que además ha ido reinventándose y acogiendo nuevas técnicas e ingredientes. Esto hace de la gastronomía peruana una de las más reconocidas del mundo, ofreciéndonos más de 400 platos típicos. ¡Un real y placentero desafío!
En 2011 en particular, Perú celebró también el Bicentenario con un mes de Julio dedicado a la peruanidad, que entre otras cosas es precisamente eso, su tradición culinaria: elemento que para el Perú ha resultado fundamental porque eso nos une a todos… nos vemos reconocidos alrededor de un Ceviche, o de una Causa, o de un Ají de gallina, todos nos sentimos identificados, como expresa Carlos Amézaga, Cónsul General Adscrito de Perú en Buenos Aires, en exclusiva para EspacioGastronómico.com.ar. Yo me siento orgulloso de ser peruano (…) por toda la cultura que nos ha dado esta tierra. El peruano es gente de bien, nos cuenta Elvis Aguirre, propietario del restaurante Mochica, quien lleva 11 años en la ciudad y durante ese tiempo ha visto surgir de a poco la variada y amplia oferta gastronómica peruana en la ciudad, cuyo epicentro ha sido el sector del Abasto, cerca del shopping.

Y es que el tema de la cocina que nace en lugares tan fríos como Arequipa, tan costeños como Trujillo o Chiclayo, o exuberantes y tropicales como la selva misma, se ha convertido en parte esencial de la campaña de marca país que Perú sostiene y proyecta hacia el resto del mundo, con el firme objetivo de llegar a cada vez más capitales, con workshops y demás eventos gastronómicos. Queremos, pues, también que el Ceviche, la Papa rellena o la Causa sean elementos de reconocimiento de la gastronomía peruana a nivel mundial (Amézaga). Y Buenos Aires es sin lugar a duda una excelente muestra de esto, donde los comensales peruanos, locales y extranjeros, así como van a comer italiano, asado, también deciden ir a comer peruano y tienen una gran variedad de donde escoger (Amézaga). Además, ocurre algo singular respecto a las escuelas locales de gastronomía, y es que muchos chefs peruanos jóvenes llegan a tecnificarse, pero al mismo tiempo ellos traen más conocimientos, lo cual se refleja –en beneficio para quienes disfrutamos la buena comida- en una renovada oferta, con cartas de restaurantes y hoteles que cuentan ahora con ese touch de Perú que tanto nos gusta.


Mochica: cultura y alta cocina
Tratando de dar de comer a nuestros connacionales, nuestra comida se ha ido imponiendo (…) y los restaurantes han pasado a ser de muy alta cocina, de hecho ya tenemos acá dos o tres del mejor nivel, refiere Amézaga, lo cual ha sido primordial en el éxito de esta gastronomía, sostenido por un par de aspectos fundamentales: primero, la gran comunidad peruana en Buenos Aires y el GBA, principal cliente y personal laboral de estos restaurantes, y por ende, la necesidad de fortalecer el sentimiento de identidad y la cercanía con el origen, ambos alimentos de una peruanidad que nos invita a conocer no solo sus sabores sino también su cultura.
Entonces que no nos sorprenda que actualmente halla aproximadamente 150 restaurantes de comida peruana, situados en zonas como Abasto, Palermo, Belgrano, San Cristóbal, San Telmo, Barrio Norte, Vicente López, entre otras, con menús tradicionales y otros que tienden más a la fusión y alta cocina. Mochica es precisamente un ejemplo de lo segundo, y con apenas 3 años de servicio se ha convertido en lugar obligatorio si de comida peruana se trata.
Igual que la cultura precolombina que le da su nombre, Mochica se ha movido con espíritu precursor, pero además es en pocas palabras: un gran acierto logrado en familia. Decidieron abrir las puertas apostándole a un restaurante en donde brindáramos un servicio distinto a los demás, nos dice Aguirre, originario de Trujillo, costa norte de Perú.
Pues yo, que de comida hablo porque he aprendido a disfrutarla, puedo decir que en Mochica no sólo se come: Se viaja a Perú. A través de sus sabores y aromas, de las paredes, huacos cerámicos y demás elementos que evocan la cultura Mochica, de las fotografías que retratan Machu Picchu, y claro, de su gente misma, provenientes de varias partes del país, este restaurante nos lleva a conocer un poco más de un gran amigo llamado Perú.
Segura estoy de algo: ahora, comer un Ceviche, un Tiradito, o quizás una Causa, definitivamente conllevará efectos gratos y placenteros, y a su vez hará de nuestro sentido del gusto, el sentido más ambicioso que tengamos. ¡Siempre deseará probar más!
Datos
El restaurante Mochica está ubicado en Agüero 520, C.A.B.A.
4866-2200 • info@restaurantmochica.com.ar