7/3/13

Ecuador Restaurant Week 2013


Una experiencia gastronómica en Guayaquil... 
¡Como para no perderse!


¿Qué es Restaurant Week?
Restaurant Week Ecuador es un evento que se llevará a cabo simultáneamente en varios de los principales y más renombrados Restaurantes de Guayaquil, los cuales ofrecerán un menú a precio fijo para todos los que aman la gastronomía y su diversidad.
Este evento será una magnífica oportunidad para recibir San Valentín de una forma diferente, todos los comensales asistentes podrán probar la gastronomía de los restaurantes participantes-visita la pagina de restaurantes para ver cuales estarán participando y sus menús fijos con los precios.

Fuente y más info en http://www.restaurantweek.com.ec/

Nota en diario El Universo: http://unvrso.ec/0004THG





[Imágenes de Ecuador Restaurant Week 2013]

4/3/13

Starbucks Coffee: una imagen vale más que mil palabras, dicen


El primer domingo de marzo, decidimos empezar con un proyecto personal de literatura e ilustración, y como todo buen proyecto de este tipo: estuvo acompañado de una taza de café. Bueno, las tazas no fueron precisamente tazas, sino vasos de cartón, y los cafés no fueron cargados ni expresos, sino más bien un frapuccino caramelo y un latte vainilla, éste último sí caliente. Y desde la vitrina hizo señas un muffin de arándanos grandecito, que también se nos unió.


Ahora bien, vamos despacio. El lugar al que fuimos es el Starbucks esquinero de Santa Fe y Callao. La verdad lindo a lo lejos, pero al acercarnos me percaté del estilucho de las paredes de la entrada, que en realidad no van con lo que intenta proyectar esta cadena de café. Paredes y pilares pelados, solo cemento con imperfecciones, a los que alguien añadió grafitis que de veras no parecen ser adrede y por tanto no van con los precios que al interior te encuentras. Aunque tampoco es uno de los cafés más caros, creo que está sobrevalorado. Y bueno, eso hace el asunto de la marca hoy en día, qué va a hacer...

A esa hora, 6 y algo de la tarde, el lugar estaba repleto. Con la esperanza de tener un sitio donde poder trabajar a gusto, entramos, decidimos nuestra orden y listo. El servicio en la caja estuvo dentro de lo normal, amable y ágil. Mientras nuestras bebidas eran preparadas, aproveché para subir, supervisar el área y obvio, agarrar alguna mesa.


Y bueno, como esta bitácora no trata de mi vida o actividades en sí, sino de las experiencias gastronómicas de cualquier índole, iré directo al punto. Pues bien, las bebidas estuvieron bien, aunque tampoco para saltar de emoción. A ver, de un modo más sencillo: el café de Starbucks es un café más. Lo repito, sobrevalorado por el asunto de la marca. En las 3 cosas que pedimos: $64,00 pesos arg. Y no es una queja esto, uno paga lo que quiere y está dispuesto a pagar, no obstante cada vez que vayamos a un Starbucks sepamos que no estamos comprando un buen café sino una buena marca. Y sé que esto no es nuevo.

No he sido fanática de Starbucks nunca. En Ecuador no existe. Estando en Atlantic City no me picó el bichito por saborear ese café del que tanto hablan, y ahora viviendo en Buenos Aires, apenas he ido 3 veces. La idea general que tenía es que es un café caro aunque pagable, bueno, y de calidad en el servicio. No obstante, en esta ocasión, ya casi al final, subí al baño, parte importantísima de un lugar de comida, yo así lo creo. Y lo que encontré me hizo añicos la imagen:


Incluso había un cartelito sobre el inodoro que pedía por favor depositar la basura en el tacho de basura; un tacho inexistente, claro. Esto es algo que no perdono. Incluso el McDonalds puede darse el lujo de tener baños sucios, porque ya sabemos que los baños de esta cadena de comida rápida son como los baños públicos del mundo. En Buenos Aires, sobretodo los de calle Florida, ¿o no? ¿Pero Starbucks? Mmmm. Decepción. 

Postdata: He probado un muffin de arándanos mejor en la panadería San Camilo de Santiago de Chile.


N.G.